Software libre y legal

Axel Ruiz es el Chief Technology Office, de SiGNUs. Su gusto por la pizza lo inspira a hablar de su empresa, dedicada al software libre o de fuente abierta. “No es posible que a uno lo obliguen a comer solo uno o dos tipos de pizza, hay que escoger entre muchas posibilidades”, afirma. En este razonamiento ha basado la filosofía de su empresa en los últimos años: brindar la posibilidad de que las personas y organizaciones posean libertad tecnológica.

Axel Ruiz, chief technology office,
de SiGNUs.

Durante su formación como ingeniero en sistemas, más que interesarse solo por la parte técnica, lo atrajo la filosofía del desarrollo de software, lo que hay detrás del desarrollo comunitario, del trabajo en equipo y de cómo esto podía concretarse en un negocio. En 2005, Ruiz calculó que el 85 por ciento de las empresas utilizaban software sin licencia o pirata y no había empresas que desarrollaran software o brindaran asesoría para instalación de software libre.

Actualmente, una licencia anual de software, según Ruiz, cuesta hasta Q3 mil. Difícilmente instituciones como municipalidades, organizaciones comunitarias o empresas medianas pueden asumir ese costo, por lo que es más fácil instalar software pirata. La alternativa que Ruiz ofrece por medio de SiGNUs, Open Training y de e-Ntiers Consulting es la posibilidad de “liberarse del uso de software de pago” y utilizar un software libre y además legal.

Lo que las empresas adquieren en este modelo no es una licencia sino el servicio de migración desde un software de pago a un software libre, el acompañamiento y la asistencia técnica durante el proceso de adaptación y la capacitación que oscila entre las 10 y las 40 horas, para que los usuarios finales se adapten al nuevo software que es distinto, señala Ruiz.

SiGNUs, e-Ntiers Consulting y Open
Training ofrecen software libre y legal.

No es una capacitación desde cero, porque hay conocimiento de cómo funcionan los programas pagados y entre ambos sistemas hay buena comunicación, ya que responden a estándares internacionales. Aunque advierte que, en algunos casos, no les gusta mencionar que es un producto gratuito porque “la gente tiene la mentalidad de que si algo es más caro, es mejor”, y no es así, añade.

Otra de las ventajas señaladas es que, se pueden armar paquetes compatibles de acuerdo a la necesidad de cada empresa. Pero, también “es la libertad de no tener que comprar año tras año una licencia”, e insiste en que es un proceso colaborativo, ya que el software abierto se puede modificar de acuerdo a las necesidades y cualquier usuario que tenga los conocimientos técnicos lo puede hacer, con lo que fortalece los desarrollos locales, explica Ruiz.

Para el emprendedor, la responsabilidad social es importante. Señala que, gracias al software libre, muchas computadoras desechadas por inservibles están siendo reutilizadas en las comunidades. Durante noviembre se realizará en Chiquimula el día del software libre, habrá instalación gratis y capacitación a quien lo desee. La libertad tecnológica es la tendencia mundial, señala Ruiz.

Roberto M. Samayoa O.
Periodista
Revista GERENCIA
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